Un niño puede perder peso siguiendo tan sólo dos consejos

La obesidad en los infantes es uno de los temas que más preocupan a los nutricionistas, ni hablar a las familias. La educación en la alimentación a una temprana edad puede provocar cambios inesperados en la fisonomía de un niño. Pero no sólo de eso se compone una buena alimentación. Es fundamental consumir pocas calorías además de realizar mucha actividad física.

Un estudio de la Universidad de Colorado, en Estados Unidos dio la clave para que los padres puedan controlar el peso de sus hijos. Deben consumir 100 calorías menos de azúcar diarias por persona y a caminar unos 1.600 metros más por día. De esta manera se podría perder peso rápidamente.

También sostienen que este tipo de consejos son mucho más efectivos que las dietas a largo plazo y el comer poco y sano. El deporte y la actividad física cumplen un rol determinante, incluso más importante que una simple dieta.

"En el tiempo, esta será la mejor estrategia para combatir el problema de la obesidad", dijo el doctor James O. Hill

En Estados Unidos se creó un programa llamado “America on the Move”, para poder terminar con los problemas de obesidad que atraviesan en ese país. Constó de 192 familias con al menos un niño con sobrepeso, o con riesgo de tenerlo.

La iniciativa alienta a las personas a mantener un peso saludable mediante cambios mínimos en el estilo de vida, como caminar 2.000 pasos más por día.

A los seis meses de realizado el estudio se notó que los niños comenzaban a tener una reducción significativa en el índice de masa corporal.

El 67 por ciento de los niños que participaban del programa mantuvieron o disminuyeron el IMC, contra el 53 por ciento de los niños del grupo de autocontrol.

En Norteamérica ya comenzaron, ahora falta implementarlo en todas partes del mundo. Un buen desayuno y a correr por los parques para que nuestros niños crezcan saludables.

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