La base de toda vida de un niño es su infancia, y dentro de esa infancia las relaciones sociales y las actividades físicas y recreativas forjan el carácter y los hábitos a futuro. Muchos chicos, gracias a sus familias, siguen manteniendo esta idea, pero otros los han cambiado por videojuegos, la televisión o los ordenadores.
Por eso la Universidad de Castilla-La Mancha realizó una investigación minuciosa acerca de estos hábitos familiares y de los niños. Las malas consecuencias de esta poca actividad física y recreativa puede terminar en empeoramientos de la alimentación y hasta obesidad infantil y juvenil.
El estudio comenzó hace ya muchos años, con la idea de realizar un trabajo de campo a largo plato. En 1992 esta universidad realizó el trabajo Evidencia Científica en la Prevención del Sobrepeso en Escolares. En este año se comenzaron a controlar los niveles de obesidad de la población española.
Los resultados en un comienzo eran alentadores, estadísticamente hablando, pero todo no terminó tan bien. Los especialistas descubrieron que los índices de colesterol disminuyeron entre los niños, pero no así la obesidad, que se vio reflejada por el IMC. Este índice aumentó varios dígitos, llevando la situación a un plano preocupante.
Obviamente, no hace falta decirlo, desde aquí te recomendamos que tengas cuidado con la alimentación de tus hijos, pero también debes poner énfasis en las actividades que realiza. Un equilibrio entre el encierro y la recreación es lo ideal.
viernes, 8 de febrero de 2008
Jugar es fundamental para el buen desarrollo alimenticio de los niños
Publicado por Ignacio Damonte en 13:11
Etiquetas: estudios científicos, niños, obesidad
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