Más de una vez nos hemos referido a la importancia de un buen desayuno para que tu día comience con las mejores ganas y proteínas. Gracias a un desayuno completo muchos de los nutrientes que necesitas en el día los obtienes en una comida.
Otra de las claves de los desayunos, en este caso para los niños. Algo que caracteriza a los más pequeños es que no les dan mucha importancia a la primer comida del día. Normalmente la comen rápido y mal y eso influye fuertemente en su nutrición y hasta puede derivar en obesidad.
Hay muchos niños, el 6,8%, que no desayunan habitualmente, y casi un 6% dedica a la primera comida del día menos de 10 minutos. Mientras que un 7,5% ingiere un desayuno equilibrado, que incluya leche, zumo e hidratos de carbono.
En estos casos mucho tienen que ver las familias, porque no se fijan en que sus hijos consuman los desayunos de la manera adecuada. Pero no sólo el ámbito familiar tiene incidencia en esto, sino que también el ámbito escolar, ya que muchos niños desayunan en sus escuelas y lo hacen de mala manera y sin control de los mayores.
En notas anteriores hemos remarcado el hecho de que el peso de un niño muchas veces lo sigue por el resto de su vida y los controles que tendría que tener a temprana edad pueden complicar la salud cuando sean grandes.
Este problema tiene que ser tratado por las autoridades para no terminar padeciendo una generación de personas obesas. Es posible bajar estos números tratando el tema en familia y haciéndole entender a los niños que todo esto es por su bien.
miércoles, 12 de diciembre de 2007
Obesidad infantil: Un buen desayuno es clave para evitarla
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